Los perros son capaces de sentir celos si su dueño le pone atención a otro animal, por ello en muchas ocasiones se les ve debatiéndose por el regazo de su amo junto con otra mascota que quizá se encuentra de visita. (ARCHIVO)
Seguramente alguna vez has visto a tu mascota comportarse de forma peculiar cuando se acercan otros animales a ti, sobre todo si les brindas un poco de atención, esto es aún más usual en los perros.
Según un estudio realizado por la Universidad de California en San Diego, Estados Unidos, los perros son capaces de sentir celos si su dueño le pone atención a otro animal, por ello en muchas ocasiones se les ve debatiéndose por el regazo de su amo junto con otra mascota que quizá se encuentra de visita.
El estudio de Christine R. Harris y Caroline Prouvost, publicado en la revista PLOS One (revista científica revisada por científicos), determinó que de las 14 razas de perros participantes en el análisis, todas mostraron celos de los objetos que se les dieron a sus dueños para mimarlos: perros de peluche, libros de niños, calabazas de plástico.
Los participantes fueron algunos perros de las razas pugs, salchichas, corgies y terriers, ya que buscaban perros que pudieran controlar más fácilmente si se descontrolaban. Mostraban conductas agresivas y posesivas.
Los bebés de seis meses han demostrado sentir celos de objetos inanimados que luzcan como otro bebé (juguetes) si la madre les pone atención, pero saben diferenciar entre ello y cualquier otro objeto; en el caso de los perros fueron celos generalizados.
La territorialidad y protección de recursos son consideradas como características típicas de los celos y según el blog Experto
Animal, algunos de los síntomas son:
-Intenta desesperadamente captar la atención del dueño.
-Intenta interrumpir la interacción entre dueño y rival.
-Se muestra muy atento a la interacción.
-Ruge, empuja, taclea, ataca o muestra diversas señales de agresividad.
Hay situaciones en las que es normal que el perro vaya a sentir celos, por lo que debe ser preparado, ya sea por un nuevo bebé o embarazo; también pueden llegar a sentirlos por la pareja de su dueño si no está muy familiarizado, por lo que si no responde a las órdenes básicas es necesario acudir con un veterinario especialista en adiestramiento con el fin de evitar problemas a futuro.
