Los aficionados laguneros estuvieron presentes en el 'Templo del Desierto' para apoyar a sus Guerreros tras la pausa. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Tras una larga espera superior a 576 horas, regresó el futbol a la Comarca Lagunera con los Guerreros recibiendo a un peligroso visitante, los Tuzos del Pachuca que han sido candil de la calle durante el actual torneo.
Había que dar el grito y los laguneros querían desgañitarse con los goles de sus Guerreros, quienes tenían en la mira el liderato de la Liga MX, pues una victoria los pondría nuevamente en lo más alto del escalafón. Es por ello que los aficionados respondieron otra vez al llamado de los colores verde y blanco, acudiendo en gran número al estadio Corona para hacer la peculiar fiesta, primero en el estacionamiento con comida y bebida, luego en la tribuna con los jugadores en la cancha, cerrando la actividad de la jornada 9.
Antes del silbatazo inicial, se entonó el glorioso Himno Nacional Mexicano en lo que debería constituirse como una bonita y cívica costumbre, poniendo de pie a los aficionados por primera vez en la todavía soleada tarde. Pero para sorpresa de los Albiverdes, los primeros dos gritos de festejo, fueron del lado hidalguense, sorprendiendo con par de goles para tomar ventaja temprana que ponía en alto riesgo, el buen paso que han tenido los santistas en su casa durante el año futbolístico, siendo el estadio Corona una auténtica fortaleza en la que es realmente difícil llevarse puntos por parte de los visitantes.
Se palpaba el nerviosismo en el graderío, mientras que en la cancha los Guerreros no encontraban la manera de atrapar a los Tuzos, hasta que en la recta final del primer lapso, apareció Julio César Furch para con un derechazo, enviar el balón al fondo de las redes y acercar a los de casa. "México Lindo y Querido", interpretó un mariachi durante el medio tiempo, poniendo el sabor patrio a lo que ya era una noche futbolera, la cual disfrutaron los aficionados, sin dejar de lado que su equipo tenía que remar contra corriente en la parte complementaria.
Otro grito de gol, furioso, entonaron los espectadores cuando Julio Furch marcó desde el punto de penalti, remontando el partido y preparando el escenario para que los Guerreros apabullaran a su rival hasta llevarse la victoria, al tiempo que "El Emperador" asumía el liderato de goleo individual en la Liga MX. Pero contrario a lo que se pudiera creer, el Pachuca no se encerró a piedra y lodo, sino que siguió atacando y por poco se lleva la victoria, pues los postes terminaron por salvar a los Guerreros, quienes generaron espacios y oportunidades, pero nunca se animaron a hacer disparos de media distancia.
El grito fuerte, poderoso, el de la victoria, se quedó guardado en las gargantas de los aficionados, quienes dieron el ¡Viva México! Un poco más tarde, sin poder tener una noche redonda, con una victoria de sus Guerreros. Santos permanece en el tercer lugar general y se le escabulló la chance de trepar anoche al liderato, sus aficionados se retiraron con un sabor agridulce y no faltó quien comentara que el receso futbolístico le jugó en contra a los de Almada, quienes perdieron la marca perfecta en casa, aunque viene lo mejor del campeonato.
