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En la frontera entre Argentina y Brasil, se encuentra el sistema de cataratas más grande del mundo. Divide en dos al río Iguazú y forma una gigantesca herradura que alcanza casi tres kilómetros de longitud. Son aproximadamente 275 caídas de agua de diferentes tamaños; la cantidad exacta de cascadas depende de la temporada húmeda o seca del año.
EL TOUR EN ARGENTINA
En el Parque Nacional Iguazú hay tres circuitos de puentes para acercarse a las cascadas. El más popular es Garganta del Diablo, que mide un kilómetro y te deja frente al salto de agua más espectacular del sistema. El sendero Upper Circuit pasa por encima de varias cascadas, mientras Lower Circuit te pasea por su parte inferior. Para moverte entre un circuito y otro hay un tren ecológico. La entrada a la reserva natural cuesta 800 pesos argentinos (278 pesos mexicanos).
EL TOUR EN BRASIL
Para ver los saltos de agua en el Parque Nacional do Iguacu, solo hay un puente (de mil 200 metros de largo). Cuenta con varios miradores; uno de ellos da hacia la Garganta del Diablo. La entrada cuesta 57 reales (273 pesos). La reserva ofrece transporte público, cuya tarifa es de 11 reales (53 pesos).
PASEOS BAJO LA LUNA
Cinco veces al mes el Parque Nacional Iguazú, en Argentina, organiza un paseo nocturno por las cataratas. Hay tres turnos, y el primero comienza a las 7:45 de la tarde. Un guía de la reserva te explica sobre los sonidos y olores de la selva mientras se aproximan a la Garganta del Diablo para ser testigos de su poderosa caída de agua en la oscuridad. Es necesario reservar tu lugar. El costo para mayores de 12 años es de mil 900 pesos argentinos (659 pesos mexicanos, aproximadamente). iguazuargentina.com
PATRIMONIO MUNDIAL
Tanto el parque nacional de Argentina como el de Brasil fueron declarados por la Unesco Patrimonio de la Humanidad. El primero obtuvo el reconocimiento en 1984; y el segundo, en 1986. La designación no solo se debe a la belleza de las Cataratas del Iguazú, sino a la biodiversidad de la selva que las rodea. Aquí viven especies amenazadas: el jaguar, el puma, el águila harpía, el tapir y la nutria gigante, por ejemplo. También hay animales poco comunes, como el caimán yacaré que solo puede hallarse en Sudamérica.
DÓNDE ESTÁN
Dos tercios de las cataratas están al noreste de Argentina; exactamente, en la ciudad de Puerto Iguazú, provincia de Misiones. El tercio restante se ubica al sur de Brasil, en la localidad de Foz do Iguacu y estado de Paraná. En ambos países hay un aeropuerto a menos de media hora.
La leyenda
Existe una historia guaraní sobre el origen de las cataratas. Habla sobre Mbói, una deidad acuática que se enamoró de Nalpí, una chica que sería sacrificada en el río Iguazú. Cuando ella quiso escapar con un hombre llamado Tarobá, a quien amaba, el dios estalló en ira y partió el río en dos, creando las cataratas, de acuerdo con World Wildlife Fund. A Nalpí la convirtió en piedra y a Tarobá, en una palmera.
CHIQUITOS, PERO VALIENTES
Es posible distinguir vencejos volando en picada hacia las caídas de agua, donde lucen diminutos. Detrás de estas cortinas naturales hacen su nido para protegerse de los depredadores.
PARA DORMIR ARRULLADO
Dos hoteles de lujo ofrecen vistas hacia esta maravilla natural: Belmond Hotel das Cataratas, en Brasil, y Gran Meliá Iguazú, en Argentina. En este último, la panorámica no es exclusiva de algunas suites, también está disponible en una alberca de borde infinito y un restaurante.
EMPÁPATE
Si te gustan las emociones fuertes, te recomendamos contratar un paseo a toda velocidad en jet boat para acercarte a las cataratas y empaparte con su brisa. Si te quedas "picado", haz un recorrido de rafting por los rápidos del río Iguazú. Hay touroperadores en ambos países; Macuco Safari, en Brasil, es uno de ellos.
275 caídas de agua de diferentes tamaños.
