Cientos de laguneros acudieron a la iglesia de Guadalupe a visitar la Virgen Morena en su día.
Sin importar las clases sociales, en la parroquia se observaba a gente que llegaba con sus bebés, abuelos, parejas o familias completas a visitar a la Guadalupana.
Llevaban flores, globos, imágenes y crucifijos.
Aunque se quitaron varias hileras de bancas para permitir el acceso a más peregrinos en la iglesia, el lugar estaba abarrotado de fieles seguidores.
La misa se celebraba en forma consecutiva.
Cuando apenas salían algunos fieles, entraba un mayor número que formaba largas filas esperando llegar al altar y dejar un presente a la virgen.
Las madres jóvenes cargaban a sus bebés vestidos como Juan Diego o como danzantes, todos ellos futuros guadalupanos.
Una gran armonía y sensación de alegría es lo que muchos sentían al estar unos minutos en la iglesia, por lo que algunos esperaban llegar al altar y rezar más de cerca para pedir protección o simplemente agradecer.
Una gran romería
A media mañana, a las afueras de la parroquia había una gran romería de comerciantes que ofrecían desde la tradicional fotografía de sus niños o familias con la imagen de la Virgen Morena, hasta la venta de ropa de invierno, flores, bebida y antojitos.
Víctor es el dueño de Fotografía Sierra, y reconoció que desde el pasado 17 de noviembre las ventas estuvieron muy flojas, pero esperaba que en el día de la Virgen de Guadalupe se vendieran más calendarios con la fotografía familiar o de los más fieles pequeños.
Comentó que esperaba que llegaran más niños con sus mamás en el transcurso del pasado jueves para que se tomaran la tradicional fotografía de San Juan Diego junto con la imagen de la Virgen Guadalupana.
Antojitos
Otros comerciantes de la región elaboraban los tradicionales antojitos mexicanos, como tamales, buñuelos, gorditas, atole, tamalitos y postres que ofrecían a los fieles.
11 DE LA NOCHE
Del pasado miércoles se cantaron las tradicionales 'Mañanitas' a la virgen.