Trascienden. Actualmente los hijos de los fundadores de la agrupación también forman parte de esta propuesta musical. (CORTESÍA)
Corría el año 1967 y en la Escuela 18 de Marzo, ubicada frente al Parque Morelos de Gómez Palacio un grupo de jóvenes con inquietudes musicales idearon crear una agrupación. Fue así que alguien llegó con su guitarra en mano, otro se unió al son de su acordeón, y uno más hizo sonar el pandero. Al pasar el tiempo, eran más de 20 almas musicales haciendo ruido dentro de esa institución educativa.
Luego, la matrícula estudiantil tuvo que mudarse a un edificio ubicado en la zona termoeléctrica del municipio. Ahí, el grupo de jóvenes músicos adquirió formalidad bajo el nombre: Estudiantina de Alumnos del Instituto 18 de Marzo. Desde entonces la propuesta musical ha sido inmune al paso del tiempo y continúa compartiendo su música, ahora, con el título de ex alumnos.
Cuauhtémoc Benjamín Rincón Castañeda, representante actual y parte de los fundadores de esta estudiantina, compartió que en ese tiempo fueron apoyados por el estado, el municipio y por el mismo Instituto 18 de Marzo, por lo cual pudieron uniformarse y adquirir nuevos instrumentos.
Sentado detrás del escritorio de su consultorio médico, Rincón Castañeda compartió que la tradición de las estudiantinas tiene sus raíces en España, país en donde los alumnos con dotes artísticos compartían su música a cambio de unos pesos para poder obtener algo de manutención. En su caso, dijo, lo hacían y siguen haciendo por amor al arte y con la intención de que esta tradición no muera.
La preparatoria, relató Cuauhtémoc Benjamín, la pasaron entre las aulas y en diversas plataformas en donde pudieron presentarse, como en las ferias municipales, y en las llamadas fiestas de Covadonga. "Cuando concluimos los estudios de preparatoria cada quien comenzó a tomar su profesión, ese fue un parteaguas, se terminó la estudiantina como agrupación (formal) aunque seguimos teniendo contacto a distancia, porque mucha gente salió de la ciudad y ya no nos pudimos juntar, hasta que terminamos nuestros estudios".
Con destellos de orgullo Rincón Castañeda comentó que los más de 20 integrantes de la estudiantina obtuvieron títulos universitarios y se dedicaron a ejercer su carrera. Pero, golpeados por la nostalgia y al no perder el contacto, en la década de los 90's decidieron reactivar sus instrumentos y con sus trajes de tuna (indumentaria propia del siglo de oro español) bien puestos le dieron un segundo aire a la agrupación, esta vez adhiriendo a familiares jóvenes.
RECUERDOS Y FILOSOFÍA
Sobre los momentos más importantes que han vivido como estudiantina, Rincón Castañeda no dudo en responder y respetando la línea del tiempo expresó que: "En primer lugar la primera presentación que tuvimos justamente en la plaza de Gómez Palacio estrenando uniformes e instrumentos. El siguiente fue cuando nos invitaron a viajar a El Monte en California. Mediante el programa de Ciudades Hermanas en 1969, estuvimos entre los meses de noviembre y diciembre actuando prácticamente tres semanas a diario y grabamos por ahí una cinta en Estados Unidos. Y el siguiente momento fue la reagrupación en la década de los 90's".
Cuauhtémoc, también guitarrista de la estudiantina, está convencido que la filosofía de la agrupación está centrada en participar en la formación integral de los jóvenes. "Es una música muy alegre y con eso intentamos atraer a los jóvenes para encausarlos en el camino del bien".
Compartió que actualmente son 18 integrantes los que ensayan en una casa particular, en espera de ser invitados a algún evento para llevar su música de manera gratuita, pues Rincón Castañeda informó que no cobran ni un peso por presentarse, pues dijo, lo único que los mueve es compartir este arte con la sociedad.
"Creo que es una buena propuesta que tenemos a la ciudadanía y sobre todo que estamos en la mejor disposición de participar en cualquier festival que nos inviten", expresó.
Sobre la importancia de que la región cuente con la propuesta musical de una estudiantina, enfatizó "es en no dejar decaer este estilo musical que es muy alegre y que básicamente va dirigido a gente joven, aunque le gusta también a la gente un poquito más antigua. Lo que queremos es que no se olvide este tipo de música, que acá creemos que a los jóvenes les gusta mucho y les hace distraerse en forma positiva".
Por último, Rincón Castañeda comentó que posiblemente sean la única estudiantina que exista en la región, por ello, dejó la puerta abierta a que más gente se sume a la propuesta que hace más de 50 años hecho raíces y que actualmente se mantiene erguida al tiempo, con el firme próposito de que esta tradición no encuentre su punto final.
