Estima OIM que alrededor de 200 mil libios fueron desplazados. (EFE)
La Organización Internacional de Migraciones (OIM) estimó ayer que alrededor de 200 mil personas han sido desplazadas en Libia desde abril del año pasado, debido al conflicto interno que vive ese país del norte de África.
De esa cifra, la mayoría, alrededor de 150 mil, provienen de la capital Trípoli y la región aledaña, en enfrentamientos ya han dañado el hospital de Al Khadra, donde se atiende a los pacientes de COVID-19.
La situación ha empeorado desde hace un año, señaló Federico Soda, jefe de la misión en Libia de la OIM, quien hizo ver que los enfrentamientos ocurren sin importar los contagios de la nueva cepa de coronavirus.
Libia registra la lucha de dos gobiernos que se ostentan como legítimos. Por una parte el llamado Acuerdo Nacional al frente del cual se encuentra Fayez al-Sarraj como primer ministro y reconocido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Enfrente se ubica el Ejército Nacional de Libia, encabezado por Khalifa Haftar, vinculado al depuesto y asesinado Muammar Gaddafi en 2011, quien había logrado mantener cohesionados a los diversos grupos étnicos libios, cohesión que se perdió tras su derrocamiento.
Soda advirtió que nadie ha hecho caso al llamado a un cese al fuego de tipo humanitario, el cual se ha hecho en el marco de la actual pandemia.
La OIM destacó que en el último año, cuando los enfrentamientos se han recrudecido, el conjunto de la infraestructura libia se ha visto afectada, incluyendo la médica.
Un ejemplo es el hospital Al Khadra, atacado el pasado lunes con fuego de artillería, pero también se encuentran daños en otras 27 instalaciones de salud, reveló por su parte la oficina de asunos humanitarios de Naciones Unidas (OCHA).
En Libia el mayor riego de expansión del nuevo patógeno se encuentra en las prisiones, que se calcula alojan a mil 500 detenidos.
Sin embargo, señaló la OIM, existen miles de personas en poder de traficantes, quienes viven en condiciones inhumanas y donde el apoyo de todo tipo de organizaciones es imposible.
En los centros de detención reconocidos, la OIM ha estado haciendo tareas de desinfección, pero llamó a incluir en la protección a toda la población, a fin de contener al COVID-19, que tras el primer caso el pasado 24 de marzo, suma 20 contagiados.
