Los efectos pueden aparecer años después de haberlos inyectado. (ESPECIAL)
A lo largo de los años hemos escuchado muchas cosas que a los artistas les pasa por inyectarse o colocarse una u otra cosa artificial en su cuerpo, los biopolímeros son unos de ellos.
Los biopolímeros son sustancias sintéticas no aptos para las personas y se utilizan para rellenar áreas del cuerpo para “rejuvenecer o embellecer”, están prohibidas en algunos países pero en latinoamérica se utilizan desde hace varios años con nombres diferentes a lo que son realmente, muchas veces inyectan aceites industriales.
En el portal de la Clínica Galeana mencionan que son sustancias que el cuerpo de una persona no absorbe y producen daños irreparables al cuerpo humano.
La inyección de esta sustancia provoca un cambio de coloración de la piel hacia un tono más oscuro y lo vuelve irregular.
Generan dolores musculares constantes que van incrementando poco a poco hasta impedir realizar cualquier actividad.
Cuando son inyectados los glúteos estos son propensos a que las celulitis les luzcan más, la textura de la piel cambia drásticamente y puede provocar fibrosis y granulomas.
Las infecciones aparecen mayormente cuando se realiza el procedimiento en algún lugar clandestino, pero muchas veces es una infección interna pues los materiales que se utilizan no se esterilizaron.
Las deformaciones se deben gracias a que la sustancia se corre por todo tu cuerpo conforme pasa el tiempo, no solo se queda almacenada en el lugar donde se aplicó también se corre a otras partes.
Las personas llegan a deprimirse cuando se dan cuenta del error que cometieron al realizarse el procedimiento y ver las deformidades que se le crean en su rostro o cuerpo.
Se puede llegar a la muerte ya que los biopolímeros pueden llegar a los pulmones causando embolias o hasta el cerebro.
Los efectos no siempre son inmediatos, muchas veces pueden pasar los años y aparecer de la nada.
Es muy importante que te asesores con especialistas, recuerda que la belleza es cara y si pagas poco o no pagas nada se puede volver una tragedia.
