Nosotros Desayunos Eventos Salud

SIGLOS DE HISTORIA

EL PASO POR LA LAGUNA DEL PADRE AGUSTÍN FISCHER, Consejero y confesor del emperador Maximiliano (SEGUNDA PARTE)

P. Agustín Fischer. (México a Través de los Siglos. Tomo X. La Reforma).

P. Agustín Fischer. (México a Través de los Siglos. Tomo X. La Reforma).

GILDARDO CONTRERAS PALACIOS

Durante el tiempo que el padre Fischer estuvo en Mapimí, como cura encargado de la parroquia de Santiago Apóstol, también acudía en ocasiones al oratorio de la hacienda de Santa Rosa (Gómez Palacio), que era propiedad de Juan Ignacio Jiménez, uno de los tres grandes terratenientes de la Región Lagunera de ese tiempo, junto con Leonardo Zuloaga y Juan N. Flores. Fischer permaneció como titular del curato de Mapimí, hasta el mes de diciembre de 1862. En este último mes de su estancia en Mapimí, permaneció en la hacienda de Avilés del día 10 al 21, el 22 y 23, estuvo en La Loma y el día 24, para las festividades de la Natividad reapareció nuevamente en su parroquia de Mapimí. En la hacienda de Avilés, en donde residía el gran hacendado Juan Nepomuceno Flores, el día 12 de diciembre, fecha dedicada a Santa María de Guadalupe, celebró cerca de 70 bautizos en infantes que procedían del mismo Avilés, de San Fernando (Lerdo), San Sebastián, Sacramento, Las Leocadias, San Carlos, Torreña, San Ignacio, El Tajito, la Concepción, Los Ángeles, San José, San Juan de Casta (León Guzmán), La Goma, Zapioriz y Torreón; de este último lugar, ese día 12 de diciembre, bautizó a Simón, "que nació en el Torreón y era hijo de Guadalupe Peralta y de Mauricia Hermosillo. Sus abuelos paternos fueron: Eulogio Peralta y Manuela Marta; y los maternos: Manuel Hermosillo y Rita Espinoza".

El dato del bautizo del niño Peralta que nació en el Torreón, confirma en algo lo que relató aquel "anciano" llamado Fernando Peralta, en su información oral que le proporcionó a Eduardo Guerra a principios de 1930, para su libro La Historia de La Laguna, de ser originario de Cuencamé y que recién nacido se trasladó con su padre Guadalupe, al rancho del Torreón en el año de 1860. Con ello podemos deducir, que Fernando era hermano de Simón, el niño bautizado. Sin lugar a dudas, por su origen y su condición sacerdotal, Fischer debió haber entablado alguna buena amistad con Juan Nepomuceno Flores, quien comulgaba con las ideas conservadoras de ese tiempo. Es probable que durante su estancia en dicha hacienda, se haya hospedado en la casa de dicho hacendado. Sabemos que al triunfo de la república los bienes de J.N. Flores fueron incautados por el gobierno del presidente Juárez, por su colaboración con el gobierno del Segundo Imperio.

A su regreso a Mapimí, Fischer sólo estuvo tres día más, ya que había sido notificado por la autoridad eclesiástica de Durango que debía entregar el curato al presbítero Luis Sáenz. Todavía el día 27, bautizó a Ma. Natividad, párvula nacida el 20 de noviembre anterior, e hija de José Ma. Navarro y de Ma. del Refugio Mesa. Esos tres días los dedicó a entregar el curato, arreglar sus asuntos pendientes, empacar sus pertenencias y prepararse para salir con el rumbo de un nuevo curato de la Diócesis de Durango, al que había sido asignado.

De Mapimí, Fischer se dirigió a la villa de Santa María de las Parras, sin embargo no iba solo sino que se hizo acompañar de un joven de ascendencia alemana, originario de la Ciudad de México, cuyo nombre era el de Andrés Guillermo Eppen, en ese entonces de sólo 22 años. Se dice que Andrés nació en el mes de julio de 1840 (Familysearch. Discover your family history), era hijo de padres alemanes y ya para 1862, estaba radicando en Mapimí. Existe el dato que afirma que se casó en el mes de marzo de ese año, con la señorita Antonia Zúñiga, dama de 20 años nativa de dicha villa. Este dato no lo hemos podido corroborar en los registros parroquiales de Mapimí, por no haber localizado la partida correspondiente a dicho matrimonio. De ser verídico dicho dato, es posible que el padre Fischer haya sido su padrino de velación y que se hayan conocido en el desarrollo de sus actividades cotidianas en la villa de Mapimí. Solo un acotación a lo anterior para decir que Andrés Eppen, fue el creador del primer fraccionamiento urbano de Torreón, cuyos lotes se empezaron a vender en enero de 1888.

A la villa de Parras los viajeros llegaron el 30 de diciembre y ya para el día 31, Fischer estaba bautizando como cura interino en la parroquia de Parras a José Luis, párvulo de 17 días de nacido, hijo de Amado Castro y de Fermina Alcalá. A pesar de que empezó a administrar los sacramentos el día último del año de 1862, recibió formalmente el cargo el 8 de enero de 1863, cuando el presbítero Juan Francisco Flores su antecesor, le entregó los libros de los registros parroquiales; en el libro de bautismos se anotó: "Se ha entregado y ha recibido el señor cura Agustín Fischer en Santa María de Parras a 8 de enero de 1863. Fue la entrega el día 31 de diciembre de 1862. Juan Francisco Flores. Agustín Fischer (rúbricas)". En el libro de matrimonios, el padre Fischer anotó: "El libro de matrimonios no lo entregó el padre Flores, porque él no lo había recibido..."; días después Fischer localizó el citado libro en un estante del archivo de la vicaría del curato. Desde el 3 de marzo de 1862, hasta la fecha en que lo encontró Fischer, el 14 de enero de 1863, en el libro de matrimonios no se registró ninguna partida. Tiempo en que estuvo al frente del curato el padre Flores.

Tal vez esta grave anomalía por parte del presbítero Flores, sirvió para que Fischer pusiese una queja ante las autoridades de Durango, con fecha 13 de enero de 1863, la cual, fue contestada el día 27 de ese mismo mes, en la que se le informaba de la suspensión total de sus funciones como sacerdote, de su antecesor en el curato de Parras, Juan Francisco Flores. Fischer debía hacerlo del conocimiento del afectado y le exigiría su salida inmediata de Parras. En caso de que dicho sacerdote no obedeciere, el propio Fischer le debía negar todos los paramentos sagrados para celebrar el Santo Sacrificio.

Ahora bien, en las actas de las informaciones matrimoniales, en las que se asentaban: las intenciones del pretenso de contraer matrimonio, la conformidad y aceptación de la pretensa, la comparecencia de tres testigos y la autorización del señor cura, para que se lleve a cabo el matrimonio, a partir del día 3 de enero de 1863, en dichas informaciones, aparece la firma de Andrés G. Eppen, junto a la del padre Agustín Fischer. En alguna de ellas Eppen, se autodenominó notario nombrado. "En Parras a diez días de enero de mil ochocientos sesenta y tres. El presbítero Lic. Agustín Fischer, cura interino y juez eclesiástico... habiendo visto la antecedente información matrimonial… D. Jesús Alcalá y Juana Micaela Segovia… Y por este auto que se les leerá, a los interesados, antes de la celebración de su matrimonio para su inteligencia y debido cumplimiento, así los favorecí, mandé y firmé, ante mí el notario nombrado que doy fe. Andrés G. Eppen. Agustín Fischer (rúbricas)". Andrés Eppen, firmaba al calce de las actas como "Eppen", "Andrés Eppen" y como "Andrés G. Eppen". La firma de Eppen aparece en las informaciones matrimoniales celebradas del día 3 de enero hasta el 7 de febrero de 1863.

Tal vez, solo en ese corto período estuvo Eppen en Parras, ejerciendo el puesto de notario. Se menciona que su primer hijo Jesús Eppen Zúñiga nació en Mapimí el 23 de febrero de ese año de 1863 (Familysearch Indexing), dato que tampoco hemos podido corroborar, por la no localización del registro del bautismo de dicho niño, en los registros parroquiales de Mapimí. Si esta afirmación fueses verdadera, pudo haber sido suficiente para que Andrés dejase su puesto en Parras, apenas 16 día antes del nacimiento de Jesús.

Mientras tanto el padre Fischer permaneció en Parras, todo ese año de 1863, como responsable del curato y figuraba como su teniente el padre fray Jacinto Silva, con quien firmaba las constancias de la impartición de los sacramentos. El 14 de enero de 1864, firmaron juntos la última constancia y a partir de allí lo hizo solo el padre Silva.

Existe un vacío respecto a lo que hizo el padre Fischer después del 14 de enero de 1864, el investigador Konrad Ratz, menciona que en diciembre de 1863 (sic) fue enviado a Roma, por parte de las autoridades eclesiásticas de Durango, para tratar con el vaticano el nombramiento de un obispo mexicano y que allá paso cerca de un año. Agrega Ratz, que durante su estancia en Roma, Fischer fue presentado a Maximiliano, cuando éste señor se dirigía a México, e hizo una escala en el vaticano para entrevistarse con el Papa. Y que el encuentro Maximiliano-Fischer debió haber sido entre el 18 y el 22 de abril de 1864. Maximiliano llegó a puerto mexicano el 28 de mayo de ese año. Tiempo en el que la nación mexicana estaba sumida en una grave crisis, debido a la intervención francesa, que había iniciado sus operaciones en marzo de 1862 y que a la llegada de Maximiliano para ocupar el puesto de emperador, los ejércitos de Napoleón III se convirtieron en el apoyo militar del nuevo soberano. Ratz, menciona que Fischer regresó a la diócesis de Durango en noviembre de 1864 y es cierto que para el 20 de ese mes apareció nuevamente firmando los registros parroquiales de Parras, junto con fray Jacinto Silva, para un nuevo período en el curato de dicha villa.

Durante el tiempo de ausencia de Fischer en el suroeste de Coahuila (1864), se dieron innumerables acontecimientos de suma importancia, en los ámbitos nacional y regional. En lo nacional el presidente Juárez con su gobierno itinerante había arribado a Saltillo en enero de 1864; en febrero en Monterrey tuvo un fuerte altercado y posterior ruptura con el gobernador Vidaurri; en abril estableció su gobierno en Monterrey y ante el acoso de los ejércitos imperialistas salió de allí en el mes de agosto; pasó por el sur de Coahuila, con rumbo de Chihuahua y Paso del Norte; en septiembre en Mapimí expidió el decreto de la creación de las villas de Matamoros y de Lerdo. Mientras que Maximiliano había asumido el cargo de emperador de la nación mexicana en junio de 1864. Y en lo regional, Leonardo Zuloaga había acudido a Monterrey, para presentarle a Vidaurri su enérgica queja por el ataque a sus propiedades en La Laguna por parte de los matamorenses en abril y octubre del año anterior; el resultado del reclamo, fue una acalorada discusión entre ambos personajes y el posterior encarcelamiento en Monterrey del hacendado.

Sigue…

Fuentes:

.- Konrad Ratz. Tras las huellas de un desconocido. Nuevos datos y aspectos de Maximiliano de Habsburgo. Un concordato malogrado. Prólogo de Patricia Galeana. CONACULTA- INAH. Siglo XXI Editores, S.A. de C.V. Primera Edición 2008.

.- Contreras Palacios Gildardo. Mas de Cien Breves Documentos del Archivo María y Matheo de Parras. Enrome. 1997.

.- Archivo Parroquial de Parras (María y Matheo). Libros y fechas señaladas en el escrito.

.-Familysearch. Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Libros de Registros parroquiales de fechas y lugares mencionados.

[email protected]

Andrés Eppen. (Eduardo Guerra. Historia de La Laguna. 1932).
Andrés Eppen. (Eduardo Guerra. Historia de La Laguna. 1932).

Leer más de Nosotros

Escrito en:

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nosotros

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

P. Agustín Fischer. (México a Través de los Siglos. Tomo X. La Reforma).

Clasificados

ID: 779763

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx