De acuerdo al Inegi, el consumo privado tuvo una caída de 2.6 por ciento, la mayor en diez años.
México registró su primer golpe por la pandemia en la economía real. Según datos del Inegi, tanto el consumo como la inversión tuvieron una contracción en marzo, el mes en el que inició el confinamiento derivado del COVID-19.
Por su parte, los mercados financieros mostraron una tendencia positiva, ya que tanto el peso como la Bolsa Mexicana de Valores tuvieron un avance positivo.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que el consumo privado en México registró una caída de 2.6 por ciento durante marzo de 2020, frente al mes inmediato anterior, con cifras originales.
Alejandro Stewens Zepeda, especialista de Scotiabank, destacó que el resultado significó su ritmo más bajo del consumo desde octubre de 2009.
El Instituto detalló que con cifras ajustadas por estacionalidad por componentes, el consumo en Bienes de origen importado disminuyó 8.9 por ciento en el tercer mes del año, respecto de febrero, y en bienes y servicios de origen nacional descendió 1.8 por ciento en el tercer mes del presente año respecto al mes previo.
En su comparación anual, el consumo mostró una caída real de 2.8 por ciento en el mes de referencia. A su interior, los gastos en bienes de origen importado retrocedieron 8.6 % y en bienes y servicios nacionales descendieron 2.3 por ciento; los gastos en servicios se redujeron 5.7 por ciento, mientras que en bienes aumentaron 1.1 por ciento, con relación a los de marzo de 2019.
En tanto, la Inversión Fija Bruta (IFB) registró en marzo una caída de 11 por ciento a tasa anual, resultado que profundiza la caída de febrero de 8.7 por ciento anual.
Al ajustar la serie para eliminar los efectos de calendario, la variación resulta una contracción de 11.4 por ciento anual, cifra que apunta a que la inversión atraviesa por un desplome importante, pues aún no se reflejan las mayores afectaciones por la pandemia de COVID-19.
De esta manera, entre enero de 2019 y marzo de 2020 el índice ha bajado 18.6 puntos, una pérdida mayor a la observada durante la crisis financiera de 2009.
En marzo de 2020 el índice de la Inversión Fija Bruta (IFB), con cifras originales, se ubicó en 91.6 unidades, lo que implica que tras 14 meses de caídas consecutivas los flujos de inversión se encuentran en su nivel más bajo desde 2011.
